La cena del orfanato

Era un extraño olor... Aquel que se podía oler desde el cementerio mismo... La comida preparándose lentamente el estofado hervir... Y el cálido aroma a carne que pasaba por los pasillos de aquel orfanato abandonado...

Vergil , contra toda previsión estaba cocinando en aquel terrible lugar... Tenía bastante maña con lo que hacía... Y la comida olía bastante bien....

No sería de esperar que los niños acudieran corriendo ya que no solía comer nada elaborado... Solo habia conservas y la nevera tenía ingredientes suficientes para mucho tiempo... Sería un desperdicio sin alguien que la hiciera...

Aver si viene alguien a comer... Me siento solo de nuevo...

Mire por la ventana después de estar hecha la comida

Sintió un extraño olor en el aire. Se encontraba en los pasillos, pero parecía provenir de la cocina. Su estómago hizo un extraño ruido, por lo que colocó la mano encima de éste. Hambre. Era eso... olor a comida. Pero... no parecía ser la comida del horfanato. Alguien más estaba cocinando. Oh sí... sería una bendición...
Avanzó hasta la cocina. Debía ver quién era el que estaba salvando a todo el mundo dentro del horfanato. Y ver qué era lo que estaba cocinando. Esperaba fuera algo rico realmente. Al llegar, se encontró con Vergil, concentrado en preparar correctamente las cosas. Sonrió.

- Vale... ¿Algo más que el señor sepa hacer? No sé, quizás peluquería...

Vergil estaba tan absorto en sus pensamientos que cuando oyó una voz se sobresaltó

Uh?!

A... Eres tu n.n

Pues... Peluquería.... Nunca probé lo siento pero podría probar

Dijo sonriendo poniéndole un plato enfrente suya

Después se levanto y fue por cubiertos que lavo recientemente ya que todos estaban llenos de polvo y le puso un vaso limpio con refresco mientras luego le serví la comida y dejé que su boca hiciera el resto del trabajo sentándome a comer...

Al ver el plato de comida enfrente suyo, sintió más hambre que antes. Observó a Vergil. ¿Por qué le trataba bien? ¿Qué tenía ella? Le resultaba raro que... le trataran tan bien. Bajó la vista al plato nuevamente. Se veía tan bien. Y tenía tanto hambre. Tomó los cubiertos y probó un bocado. Luego levantó vista hacia Vergil.

- Cocinas realmente bien

- huele bien~ - una voz suave y aniñada se colo por la puerta siguiendo a su dueño
el niño no tardo en ver a un joven cocinando, y a Katty sentada comiendo
le dio una mirada al tipo y suspiro aburrido "nada interesante" se dijo mientras caminada hacia la joven

- oneechan~ - la saludó con una sonrisita

Gracias...

Dijo Vergil acabando de comer y lavando sus cosas lentamente... Hacía tiempo que no cocinaba... que nadie le decia eso... Se sentía tan.... Feliz? Era algo nuevo para el ... Supone que sentir eso no era malo... Que saber que siente por ella no le molestaba... Le gustaba bastante su compañía... Podría incluso llegar a ser feliz...

Cocinare cada día entonces...

De repente un niño llego a la sala... Vergil le hecho unos 10 años...

Nada interesante...

Imagino Vergil

Le preparó los platos y le regalo una sonrisa al niño...

Le sonrió. Sería bien comer comida realmente buena todos los días. Luego al sentir unos pequeños pasos conocidos y una voz infantil, giró el rostro sonriente. Era Kyo. Le llamo a que se sentara a comer, ya que seguramente el pequeño tambien tendría habre.

- Debes presentarte cuando hay alguien que no conoces -le dijo, como pequeña reprimenda

el niño miro al otro con desconfiansa

- el niño - dijo simplemente, no planeaba decir su nombre a alguien que no conocia
seria un error que no iba a cometer
el vio como Katt se distraia y le quito el tenedor de las manos y se comio el bocado que ella habia estado a punto de meterse a la boca

- nunca bajes la guardia, oneechan - una sonria algo extraña se poso en sus labios mientras volvia a ver a otro joven

Vergil simplemente no hacía caso del chaval.... Hasta la fecha solo necesito saber un nombre y ya lo sabía...

Jack El Destripador

Se presentó diciendo su apodo...

Vergil recogió sus armas guardandolas y sentándose en la mesa mirando por la ventana tranquilamente...

Miró fulminante al pequeño. Conocía esa mirada que le dedicaba a Vergil. 'Soy mejor que tu en todos los aspectos, y solo soy un niño'. Era demasiado claro. Suspiró, esperando que Kyo se sentara a su lado y comenzara a comer. Encima se había quedado sin su bocado de comida.

- Vale, no volveré a bajar la guardia

Miró de reojo a Vergil. Jack el Destripador. Nombre algo... antigüo. Conocido. Se preguntó porqué le dirían así.

esta vez, en voz alta el niño expresó - Aburrido~ - mientras jugueteaba con su pequeña daga en su bolsillo
se sento al lado de su auto-denominada hermana mayor.
- al gran "Jack el destripador", el niño lo encuentra solo un hablador - rimo el niño, devolviendole el tenedor a la joven

Vergil sonrió al niño mientras le miraba a los ojos

Hablar es fácil....

Dijo mientras se llevaba el dedo al mentón y luego saco una de sus 2 dagas jugando con ella un rato...

Dime , como te llamas en realidad?

Preguntó buscando una forma desesperada de matar el tiempo...

- prefiere su nombre no contar, a jack el destripador no le tiene que importar - molestarlo iba a ser facil, seguramente tenia un complejo de superioridad tipico del psicopata, facil...aburrido

Al niño me temo que voy a sorprender....

Pues mi paciencia así no se puede romper...

Dijo Vergil mirándole amablemente, tal vez una muestra de compañerismo animaría al niño a presentarse mejor...

Pero a Vergil no se le ocurría que le podría gustar al niño...

Rió, intentando disimular. El intento de rima. Dios, Kyo se molestaría. Odiaba que le hicieran burla.

el niño miro al tipo, su expresion infantil sustituida por una de odio en su mas pura expresion

- si el no sabe rimar, jackie no lo deberia ni intentar - su voz era escalofriante, fria, sin perder ese toque infantil algo aterrador - no lo invitaria ni a jugar -

Vergil sonrió y dijo...

Niño porque me insultáis?

No seria mas fácil que me conozcáis?

Dije en su tono de voz infantil...
Vergil se estaba divirtiendo haciendo reír a Katty

- Vale, vale, deja al niño en paz... No le gusta, y a mi no me gusta que le molesten

Tomo al niño en brazos, mordiendole la mejilla. Se acercó a su oído, susurrandole. Tranquilo, no es bueno que el psicópata sea el que se descontrole. Luego comenzó a acariciarle el cabello con delicadeza y cariño.

Nero iba a cierto lugar, después de la charla con Dante, pero vio una especie de humo pasar. Su estomago emitía sonidos. La verdad es que olía estupendamente, le abrió el apetito. Nero siguió el rastro del humo, salía de la cocina. Entró en la cocina y vio a tres...¿personas? No sabía como decir ahora a los "humanos". No son todos personas. Era complicado de explicar...¿acaso se podía explicar? Sin mas pensamientos entró y se sentó, a una distancia considerable de ellos ya que no sabía eran.

- el va a pagar, de eso me voy a encargar - siseo, mientras tomaba la hoja de su daga con su pequeña manito haciendose un corte
solo el dolor lo detendria de proseguir con lo que tenia planeado para aquel idiota y burlon muchacho
suspiro al ver entrar a otro chico
¿nunca se iba a acabar?

Delante de Nero no tardo en aparecer lo que sería su cena... Todos en el orfanato teníamos el mismo hogar y Vergil no veía los motivos para llevarse mal con ellos... Despues se volteo a Katty y miro fijamente a el niño posado en sus brazos...

Disculpa por lo de las rimas n.n
Aveces me pongo un poco borde...

Dijo mirándole y regalandole una sonrisa

- muerete, o deja que te maten - dijo abrazando a katt, no lo soportaba, esa actuacion de niño bueno le daba nauseas, era estupido

Tomo un poco de la comida que le habían puesto y se la llevo a la boca. Saboreaba el sabor. Mh...Estaba bueno, por lo menos, es eso mejor que nada o un trozo de pipa mordida. Bebio un poco de agua para quitarse un poco el sabor, mientras Nero seguía comiendo miraba de reojo a los dos chicos, parecían que discutían. Cerré los ojos, pensando en que pasara dentro de unos minutos..El futuro es dentro de unos segundos, no sabe lo que ocurrirá...¿O si?

La mirada de Vergil sonriente se convirtió en una carente de amabilidad , Vergil se dirigió a la ventana abriéndola dejando que la corriente de aire le animase un poco...

Ains... Es tan ... Refrescante...

Dijo para si aquel chico que observaba la luna sereno

- oneechan...de repente tengo nauseas ¿ puedo irme a mi habitacion? - pregunta el chico al ver como la sala se abarrotaba de gente
por primera vez en un buen tiempo queria leer su ejemplar de psicologia
queria ver como hacer que se largaran y se alejaran de su hermana....