Que el juego comience

se desconcentro
su guardia callo
y en un momento quieto se quedo....

su daga paso sin piedad por sus brazos y bajando por su torso y vientre...la chica se dividia a la mitad y el chico le miraba con un brillo negro en los ojos
subio a su cuello, la escasa ropa que traia la chica se teñia de carmesí....y el rostro reflejaba panico en su mas profunda y pura expresion

-lastima...y eras bonita - los ojos del chico de volvieron vidriosos mientras su daga se hacia camino por el rostro de la chica para terminar sacandole los ojos con la punta de esta

Mantenía fija la mirada en la escena frente a ella. La sangre. Los chillidos. De la bella muchacha solo quedaban jirones. Y un par de ojos rodando por el suelo. Se relamió los labios, ladeando la cabeza. Quería apreciar cada enfoque, cada luz, cada perspectiva. Quería regocijarse en otra muerte.

miró a la joven con ojos aun vidriosos y se disculpo, con verdadera verguenza

- lo siento oneechan....lo perdi...- mira hacia abajo en una ligera reverencia a lo japonés

- No debes disculparte... no vale la pena hacerlo

Le sonrió, tomando su cuchilla favorita. La izquierda. Se acercó a la muchacha, mirándola unos segundos, para luego rasgar su frágil cuello con el filo. La sangre comenzó a caer a borbotones, manchándola un poco. Se relamió los labios, sintiendo que una gota caía en ellos. Quizás no había durado mucho... pero había logrado disfrutar de la muerte.

perdido su amado control, rendido a sus instintos
era algo imperdonable, pero la chica le resto importancia
era muy instintiva....interesante
tal vez por eso....
se distrajo viendo el pequeño espectaculo que montaba la mayor, el brillo en sus ojos era inconfundible....instinto puro

Giró el rostro levemente, mirando a Kyo. Sentía que su cuerpo se convulsionaba en gozo. Se relamió, para luego agacharse a su altura y palmearle la cabeza. Sabía que quizás ese gesto le molestaría, pero qué más daba.

- Me has hecho divertir mucho, Niño

sonrio a la muchacha con un brillo especial en los ojos...¿admiración quizá?
- tambien me diverti bastante - admitio limpiando la hoja de su daga en sus shorts - podriamos jugar mas amenudo - dijo mirando con apreciacion el mutillado cadaver

Asintió con la cabeza, para luego pasar a ver el mutilado cadáver de lo que hacía tan solo unas horas era una hermosa muchacha. Se levantó, tomando de la mano a Kyo. Quizás ya era demasiado tarde para andar por esos páramos. Despues de todo, había dos cadáveres. Y ellos eran los únicos descolocados en el lugar.

- Creo que es hora de irnos

- bien - el niño asintio con la cabeza, habian hecho demaciados estragos por una noche, alguien pronto se enteraria de sus muertes, y ellos no deberian estar alli cuando eso pase

Le sonrió, tomándole de la mano, y comenzando a caminar hacia la salida del callejón. Lo mejor serís huir rápido y sin ser notados. Sonrió en el camino, pensando... que se había descargado... no solo una, sino dos veces. Y que había perdonado dos almas en penas, como un ser divino debía hacerlo.

el niño miro a la mayor, que tenia un brillo distinto en los ojos, algo habia hecho que le satisfacia hasta lo mas profundo

curioso

- oneechan...el tipo era un enfermo - dijo mientras caminaba junto a la chica

- Se les dice pedófilos -observó a Kyo, sin detener la marcha- Les agrada salir con menores y desvirgarlos

Volvió la vista al frente, aún caminando. Pensando. ¿Qué habría pasado si Kyo hubiera seguido provocando a ese enfermo? Si no fuese un niño psicópata y manipulador y no fuese su especie de 'protegido', quizás habría dado otro rumbo el destino. Y no sería el hombre el muerto. Se sacudió, sintiendo asco por pensar eso.

- y....besaste a la chica - dice el chico
perdido en sus cavilaciones como estaba, lo inconexo de sus dos afirmaciones no le molestaba en lo mas minimo
posiblemente por que esas dos frases tenian en comun, inequivocamente, dos cosas que le habian incomodado, de alguna manera.
- eso se puede? -

- Se puede... Igual que el niño-niño...

Se sentía algo perturbada por que Kyo solo recordara eso. Quizás lo habría visto demasiado extraño como para ser cierto. Suspiró.

- es raro - afirmó simplemente, nada en su cara reflejaba emoción alguna, era algo extraño, sin duda

algo curioso...

miro a la joven de reojo, si ella podia besar a una chica...siendo una chica ella misma
el imaginar todas las posibilidades lo emociono, dando como unica prueba de eso un leve brillo en sus ojos

algo que no habia imaginado...

extraño y a la vez logico

le causaba curiosidad

tendria que saciarla